Un paseo por el entramado de calles empedradas y estrechas de casas encaladas de un blanco inmaculado que suben por la vertiente montañosa, decoradas de macetas con plantas y flores preciosas.
Una de las visitas cercanas que realizamos desde nuestra estancia en Torre del Mar, Málaga, fue una tarde que visitamos el pueblo de Frigiliana. Un pueblo encantador que está situado en la vertiente occidental de la Sierra de Almijara, con unas impresionantes vistas a la Costa de Nerja, que queda a unos doce kilómetros de distancia.
El pueblo llama mucho la atención desde lejos por el color blanco resplandeciente que tienen sus casas que quedan contrastadas con el color verde de la sierra que muestra en primavera, y el azul intenso del cielo que habitualmente reina en aquella zona. A medida que te acercas a él te das cuenta de que el pueblo está muy bien cuidado no le falta detalle, tanto la zona baja que es la parte nueva, como el núcleo histórico, el “Barribarto” o barrio morisco, que es la parte alta. El conjunto del pueblo mantiene un conjunto estético muy semblante.
El núcleo histórico de Frigiliana ha estado galardonado con premios en muchas ocasiones desde el año 1982, por ser uno de los pueblos mejor embellecidos y con más encanto de Andalucía. Incluso en el 2015 consiguió entrar en el prestigioso club de los Pueblos Más Bonitos de España, que otorgan a aquellos pueblos que reúnen unos requisitos patrimoniales y arquitectónicos de calidad, aparte de otros requisitos.
El origen del casco histórico es morisco-mudéjar, donde se conserva el estilo de arquitectura morisca en la que el poblado se desarrolla en la vertiente montañosa de manera escalonada con calles estrechas que van alcanzando altura formando recodos para cambiar de dirección para seguir subiendo. Algunas de estas calles presentan escalones y adarves protegiendo el camino. El empedrado de las calles es espectacular ya que todo el Barribarto, presenta el mismo tipo de empedrado en el que forman dibujos y cenefas con piedras de diferente color.
Recorrido por el pueblo
Barribarto, Frigiliana – 2805
Vista de Frigiliana –
Calles de Frigiliana
Sus casas son de construcción sencilla que se adaptan al terreno, con una entrada central en la fachada principal, que está provista de escalones para alcanzar el nivel de la planta baja. Todas ellas están encaladas y pintadas de un blanco resplandeciente que contrasta con los colores vivos que pintan las puertas y ventanas, y también del color rojizo de sus tejados. Todas las calles están decoradas con preciosas farolas y plantas con macetas en la que todos sus vecinos se esmeran a cuidarlas para conseguir tener el rincón más bonito de su barrio.
La calle Real es la arteria principal del barrio histórico, la única que se puede acceder en coche, de ella parten todas las calles y callejuelas que suben al alto del Barribarto. Desde esta calle podrás visitar la mayoría de monumentos y rincones interesantes de Frigiliana:
- La Casa del Apero edificio del siglo del siglo XVI, actualmente contiene un interesante Museo Arqueológico y la oficina de turismo.
- Los restos del Castillo de Lizar, del siglo IX
- La Casa de los Condes de Frigiliana, que también le llaman El Ingenio, edificio renacentista del siglo XVI. Actualmente lo ocupa una fábrica de miel de caña, que es la única que queda en funcionamiento en Europa.
- Los Reales Pósitos, edificio del año 1767
- El mirador del Peñón, un espectacular mirador con unas impresionantes vistas desde lo alto del pueblo, en el que se divisa la costa de Nerja.
- Iglesia de San Antonio de Padua, construida en año 1676
- La Ermita del Ecce-Homo, del siglo XVIII
- …
Dejando aparte su belleza y el valor arquitectónico que lo tiene, Frigiliana también tiene una historia importante ya que sus primeros colonizadores datan de 3000 años a.d.c. a finales del Neolítico donde las tribus nómadas vivieron y se resguardaron en cuevas de estos parajes, posteriormente se convirtieron en sedentarios. Así se indica según el menhir que se encuentra al noreste del casco urbano de Frigiliana.
En la edad antigua, esta zona fue colonizada por los fenicios que nos dejaron una muestra de su estancia, con una necrópolis paleo púnica de túmulos, del siglo VII a.d.c., situada en el Cerrillo de las Sombras. También habitaron esta zona los romanos, según un antiguo fuerte romano que existió y que fue destruido por los vándalos. Se dice también que el nombre de Frigiliana, proviene de un nombre romano de la unión de Frexinius, un personaje romano que no se sabe gran cosa y -ana, que junto al nombre del personaje puede significar villa o cortijo de Frexinius.
La época que marcó a este pueblo y a Andalucía fue en año 711, cuando el capitán bereber Tarik desembarcó en Gibraltar, empezando la conquista musulmana a la península Ibérica, quedando esta comarca en poder del islam durante casi ocho siglos. Los musulmanes aportaron una gran cantidad de adelantos, sobre todo en la agricultura con la construcción hidráulica de acequias y albercas que aún se conservan. Esto permitió introducir la huerta con una gran variedad de cultivos y la caña de azúcar. En el siglo IV los musulmanes, construyeron el Castillo de Lizar, permitiendo tener una defensa de la zona y una vista de vigilancia de la costa mediterránea.
En siglo XVI en esta fortaleza, situada en el peñón de Frigiliana, se refugiaron una buena cantidad de moros que habían sido expulsados de la Alpujarra y de la comarca de Vélez, siendo esta fortaleza de las últimas que aún estaban en poder de los moriscos. Fue en año 1569 cuando las tropas cristianas de Luis Requesens organizaron una gran batalla para expulsarlos definitivamente.
Para seguir la historia de esta gran batalla, en año 1982 se instalaron en las calles del Barribarto, 12 paneles de cerámica, que mediante dibujos y texto explican los diferentes episodios que ocurrieron en aquella época. Es interesante seguirlos, para entender lo que significó para Frigiliana la conquista de uno de los últimos castillos dominados por los moros en la península.